De acuerdo a los criterios dispuestos por el departamento de Prevención de Riesgos del Ayuntamiento de El Campello, la concejalía de Cementerio (que dirige el propio alcalde Juanjo Berenguer) ha establecido horarios especiales en los próximos días con ocasión de la celebración del Día de Todos los Santos, cuando tradicionalmente se multiplican las visitas al camposanto.

                Así, el recinto abrirá al público los días 30, 31 de octubre y 1 de noviembre de 8 de la mañana a 7 de la tarde, y retomará su horario habitual el lunes 2 de noviembre.

Las medidas preventivas frente al COVID-19 están reflejadas en el Plan de Contingencia con respecto al funcionamiento del Cementerio Municipal, que recoge las medidas y resoluciones dictadas por la Conselleria de Sanidad Universal y Salud Pública.

De esta forma, se ha decidido que la capilla del cementerio permanezca cerrada, y no se celebrarán actos religiosos en el exterior, incluida la misa de campaña que cada año acoge el recinto el mismo día 1 de noviembre a las 5 de la tarde.

El aforo se limita a 428 personas, aunque en principio no se espera una afluencia de público que sobrepase esa cifra. Si durante algún día en especial se observara una afluencia muy elevada de público, se valorará colocar un control de acceso a las instalaciones.

No se atenderá al público en la oficina de acceso al cementerio, y se colocará una mesa auxiliar en el exterior para la atención de usuarios. La entrada y el interior mantendrán estos días su señalización especial, y se establece la obligatoriedad de usar mascarilla, mantener la distancia social y usar gel hidroalcohólico al entrar. Los usuarios deberán portar sus propios utensilios de limpieza, ya que el Ayuntamiento no prestará ese material.

 Los aseos públicos se usarán por una sola persona, salvo que precise asistencia de un acompañante. Se dispondrá  de jabón de manos, gel hidroalcohólico y papel desechable, y se aumentará la frecuencia de limpieza y desinfección durante los días de gran afluencia.